Raúl Castro propuso a Obama un ‘canal de comunicación secreto’ 2

El famoso apretón de manos entre Barack Obama y Raúl Castro durante los funerales de Nelson Mandela en el FNB Stadium de Soweto, Sudáfrica, el 10 de diciembre del 2013.Uncredited/Associated Press

El famoso apretón de manos entre Barack Obama y Raúl Castro durante los funerales de Nelson Mandela en el FNB Stadium de Soweto, Sudáfrica, el 10 de diciembre del 2013.Uncredited/Associated Press

By Nora Gámez Torres, ngameztorres@elnuevoherald.com

La administración del presidente Barack Obama utilizó al embajador español Miguel Ángel Moratinos en el 2009 para hacer llegar un mensaje a Raúl Castro y pedir una acción que reciprocara su decisión de eliminar, tras llegar a la Casa Blanca, las restricciones a los viajes de los cubanoamericanos.

En el libro Back Channel to Cuba, The Hidden History of Negotiations between Washington and Havana, Peter Kornbluh y William LeoGrande reproducen el mensaje enviado a Castro: “Diga a la autoridades cubanas que entendemos que las cosas no pueden cambiar de la noche a la mañana, pero que a lo largo del camino, cuando miremos atrás, deberá quedar claro que este fue el momento en que las cosas comenzaron a cambiar”.

Raúl Castro envió de vuelta una propuesta de abrir un “canal de comunicación secreto”, pero la Casa Blanca replicó que cualquier conversación debía entablarse a través de los “canales establecidos”.

Los autores del libro, que recoge la historia de las negociaciones secretas entre Cuba y Estados Unidos en los últimos 55 años, señalan que aunque Obama ha reconocido que una política hostil es fútil, no ha tenido más voluntad que sus predecesores en romper este impasse. Las razones quizá están en las “lecciones” que los autores resumen casi al final del texto: “Estados Unidos se ha contentado con vivir en un ‘antagonismo perpetuo’ hacia Cuba porque los costos han sido relativamente bajos, y cambiar la política supone riesgos políticos domésticos que los sucesivos presidentes han juzgado como muy grandes”.

Pero Kornbluh aseguró a el Nuevo Herald que las “lecciones” tienen que ver con lo que ha sucedido en los últimos 55 años, y no con el contexto actual.

“La política doméstica sí es un gran impedimento desde el fin de la Guerra Fría pero hay cosas que están cambiando en términos de la opinión pública en Miami y Florida”, en parte como resultado de la propia política de Obama de permitir viajar más libremente a los cubanoamericanos a Cuba, señaló.

Otro factor mencionado por el autor es que Obama es un presidente demócrata en su segundo mandato, por lo que no está tan preocupado por las repercusiones de un cambio de política.

“Florida claramente no está siendo considerada por Hillary Clinton como un estado con un voto decisivo y ella ha hecho pública su posición de que el embargo es una mala idea para la política exterior estadounidense. Estados Unidos tiene también imperativos regionales para cambiar su política. Mira por ejemplo lo que ha pasado con la Cumbre de las Américas, en la que es Estados Unidos el que está aislado y no Cuba”, agregó.

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2 comments

  1. William LeoGrande and Peter Kornbluh are leftist pro-Castro activists who during more than 40 years have been apologists of the Castro dynasty, portraying the “revolution” as a victim of what they call American “imperialism.” They have both traveled to Cuba frequently. LeoGrande traveled to Cuba in 1982 and in 1985 was a sponsor of the pro-Castro Cuban-American Committee.
    The book is published by the Univ. of North Carolina Press, whose Cuba book section is controlled by another Castro cheerleader Louis A. Perez. There is not one single book in more than a score published by UNC Press that is critical of the Castro dynasty.
    Cuban studies is a bipolar field, largely controlled by scholars who have to pass through the regime’s ideological filter if they want to do research on the island. It’s just like former Soviet studies, where you had Stalin worshipers.

  2. By the way, back channels and hidden negotiations have been an usual dish in the Cuba-USA menu. Kornbuhl and LeoGrande are serving cold meat with a clear purpose of promoting their political agenda, focused in weakening the embargo through executive orders and the exchange Gross x Avispas Trio.

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